ECOTECNOLOGIA

Los avances tecnológicos de los cuales estamos siendo testigos los seres humanos en este naciente siglo son indudablemente vertiginosos y hasta algunas veces, en un pasado no muy lejano, eran inimaginables.
La calidad de vida de los seres humanos que eventualmente disfrutan de estos avances científicos tecnológicos ha mejorado notablemente hasta el punto de que la edad promedio de un ser humano sano está rozando los cien años.
Avances en el campo de la medicina, logrando la cura y protección contra enfermedades otrora fatales para los humanos de los siglos anteriores a la mitad del XX, adelantos en el campo del transporte aéreo, terrestre y marítimo acortan el tiempo de traslado entre ciudades distantes; alimentos mejor elaborados y mejorados en sus condiciones genéticas; las comunicaciones que actualmente hacen que seres humanos de los mas remotos lugares puedan experimentar un acontecimiento simultaneo con apenas segundos de diferencia; son muestra de lo que la ciencia es capaz para mejorar las condiciones de vida del hombre sobre la tierra.
Sin embargo, gran parte de este avance ha sido desarrollado de una manera egoísta, ya que los beneficios que se han logrado han estado orientados sólo a la raza humana y, peor aun, a pocas cantidades de seres humanos beneficiados, en detrimento no solo de los otros habitantes de la tierra como los animales y las plantas, sino también de la naturaleza en su totalidad.
Los efectos nocivos de estos avances, al principio no se presentaban de manera notoria, pero actualmente con seguridad, se están presentando con la aparición de nuevas amenazas a la supervivencia del hombre cual boomerang que se devuelve pero con feroz severidad.
Estos fenómenos indeseables que la tecnología ha generado, hoy en día ya no son meros acontecimientos que ocurren en lugares lejanos y que no nos afectan, como si fuera una película de desastre de Hollywood.
Estamos presenciando en carne propia los desastres naturales que cada vez con mas frecuencia se presentan, no solo en lugares donde ocurren tradicionalmente, sino también en puntos de la geografía terrestre que hasta hace poco se consideraban estables y no representaban un peligro para la vida en todas sus manifestaciones.
Los científicos han probado contundentemente cómo la tecnología ha jugado un papel primordial en estos cambios ambientales y que hasta ahora se había ignorado.
Es por eso que la tendencia actual es la de crear tecnología amigable con el ambiente para que se consigan dos objetivos primordiales: satisfacer las necesidades de los seres humanos a la par de conservar el medio ambiente, es decir desarrollar lo que se ha denominado como Ecotecnología.
Es así como los esfuerzos en la creación y utilización de tecnología están orientados a la protección del ecosistema, la posibilidad de minimizar costos en la construcción, minimizar el daño al hombre y al ambiente que le rodea, tanto el natural como el construido, generando una cultura que definirá la calidad de vida en nuestra sociedad
Ante las calamidades por las cuales está atravesando el mundo, como los recientes desastres naturales (el terremoto en Haiti y el Tsunami en Asia), es necesario tomar conciencia y de una vez por todas, optar por crear tecnología que, como reza la carta de Río, sea una herramienta para el crecimiento económico sostenible, que reduzca la contaminación y ayude a descontaminar, moderando el consumo de energía y materias primas, brindando productos con mínimo o nulo impacto, reutilizando y reciclando elementos que permitan una coexistencia entre la naturaleza y el desarrollo. Tomando en consideración que, como explica el Programa 21, las tecnologías ecológicas "no son meramente tecnologías aisladas, sino sistemas totales que incluyen conocimientos técnicos, procedimientos, bienes, servicios y equipos, al igual que procedimientos de organización y gestión".
A pesar de que estos conocimientos ya están dando sus frutos en algunas partes del planeta, aun no son suficientes para frenar los efectos nocivos que el hombre ha provocado en el pasado, ya que se necesita un consenso de toda la comunidad científica acompañado de políticas gubernamentales que se avoquen a crear y adoptar como paradigma de desarrollo el uso conciente de la Ecotecnología.