martes, 30 de julio de 2013

Charleros y qué hacer para evitarlos


Los que andamos a pie (que no tenemos vehículo propio), nos vemos en la imperante necesidad de trasladarnos en el transporte público. Lo que nos obliga a estar a merced de lo que en ellos ocurra: calarnos la música a todo volumen, hacinamiento cuando el chofer monta a todo el mundo sin dejar el menor resquicio por donde respirar, y si es durante una tarde calurosa en una inmensa cola, los olores humanos no se hacen esperar.

Estos suplicios se ven aderezados con el abordaje de las unidades de transporte por personas que ejercen una especie de economía informal itinerante, por decirlo de un modo. Personajes variopintos que ofrecen sus mercancías, cosa que no es nueva, de  toda índole, unos en silencio y otros con sus discursos bien elaborados.

De entre los discurseros están los que piden dinero para costear los gastos que una supuesta enfermedad de un pariente, que a veces, si no es el hijo, es el propio pedidor quien la padece.

No tengo información del origen del mote, pero últimamente, a estos discurseros itinerantes, se les ha dado por llamarlos “Charleros”, me imagino que por la charla que adornan, a veces acompañada hasta por instrumentos musicales, sus pedidos a los nerviosos pasajeros de los vehículos de transporte que el azar los premió con su abrupta presencia.

La cosa fuese irrelevante y hasta divertida si estos charleros se limitaran a solo pedir y vender inocentemente su mercancía. Pero esto no es así, lastimosamente, ya que en no muy pocas ocasiones, estos individuos se han dado a la tarea de atracar, luego de su charla que culmina con una amenaza intimidante, a los desprevenidos pasajeros.

Han sido muchas las denuncias que se han hecho al respecto, porque en el peor de los casos han salido a relucir armas de fuego que han cegado  la vida a muchos ciudadanos y hasta a los propios choferes de los taxis.

No es un problema nuevo, pero últimamente han aumentado los casos y que muy pocos salen reflejados en los medios de comunicación.

En meses anteriores, se les prohibió a los charleros montarse a los vehículos, pero parece que no surtió efecto, porque igual se montan en los taxis a atracar sin decir una palabra, porque si no lo hacían entonces no son “Charleros” y por lo tanto la prohibición no los tocaba, y siguió el mal.
En esta situación ¿Qué debemos hacer los ciudadanos para minimizar la actuación de estos señores?, porque el hecho de que estas cosas sucedan en el transporte público, las personas que son víctimas de estos casos, en la mayoría de las veces son mas pobres que el propio charlero.
¿Qué le debemos exigir a las autoridades para que protejan a la ciudadanía en estos casos?


Lo que han hecho las autoridades:

En el plan operativo puesto en práctica por la Dirección de Seguridad y Orden Público en el segundo trimestre del año 2011  se giró instrucciones al Cuerpo de Policía del Estado Lara para que activara dispositivos en el centro de Baquisimeto que evitara la presencia de charleros ofreciendo sus mercancías, sobre todo en la carrera 19, carrera 18, carrera 22, avenida Vargas, avenida Rómulo Gallegos, avenida Pedro León Torres, zono este de la ciudad y otros sectores.

Lo que proponen algunos usuarios:

Que saquen de circulación a los charleros que siembra terror en la ciudadanía y dejar los que realmente trabajan honrdamente, posterior a un registro y revisión de sus conductas.

Carnetizar a los que se dedican a este tipo de actividad económica.

Lo que proponen algunos charleros:

Organizarse para que se les asigne una identificación.

Están dispuestos a permitir a las autoridades que los chequeen.

Qué proponemos nosotros?

Según mi manera de ver, este tipo de actividad económica refleja una contracción del aparato productivo del país, ya que ésta surge como consecuencia de la baja oferta de empleos que nuestra economía está generando. Por consecuencia, una solución posible ante esta problemática, debe pasar por una activación de la economía estatal, estimulando la inversión privada.

Otra de las posibles causas es la falta de estímulo para la educación de la población productiva. Es decir, la capacitación y educación de los individuos en edad productiva que los forme en actividades prioritarias para la región, tales como el comercio y la administración de empresas, que son los fuertes de la economía larense.

Es notorio el hecho de que las políticas de seguridad no son sostenibles en el tiempo. En este caso, las acciones y los dispositivos de seguridad deben ser programas constantes de los cuerpos de seguridad y no sólo operativos puntuales que surten efectos efímeros para que luego el mal vuelva y con mas fuerza.

¿Qué opinan ustedes?

miércoles, 24 de julio de 2013

QUE LA DIVINA PASTORA TE BENDIGA Y TE PROTEJA




Divina Pastora Bendita!, es la exclamación del larense ante las calamidades. “Que la Divina Pastora te proteja y te acompañe”, es la bendición con que el barquisimetano se despide de sus seres queridos.

El día a día de los moradores de esta ciudad crepuscular está impregnado con la amorosa presencia de la virgen y no hay un instante en el que no esté presente en sus mentes y en sus almas.

Los barquisimetanos y gran parte de los larenses nacen, crecen, prosperan y mueren venerando a la Divina Pastora. Nada mas ver la luz, cada uno de nosotros es mostrado ante la virgen como un gesto de agradecimiento por el milagro concedido ante la petición de nuestro bien nacer. Y cada catorce de enero, somos llevados a la procesión para que la virgen siga protegiéndonos durante nuestro transitar por la vida, estemos donde estemos.

Nuestro gentilicio está estrechamente ligado a la Pastora de las almas porque ella forma parte indisoluble de nuestra cultura y educación.

Es así como, cuando estamos en la primaria y tenemos la fortuna de estudiar en una escuela que esté en el camino por donde pasa una de las innumerables procesiones que realiza la virgen cuando va de parroquia en parroquia, durante los largos meses en que está en la ciudad, nos engalanamos para recibirla como una actividad significativa de nuestra formación escolar.

Y no solo los estudiantes. Los comerciantes y trabajadores también año tras año; y como si fuese una faena obligatoria para la prosperidad de sus negocios, dedican sus mejores ofrendas a la virgen, venerándola con sentida emoción.

En los días el los que la Zagala pastorea las almas por la ciudad yendo de iglesia en iglesia, la gente puede encontrarse con una  de esas procesiones y agregarse a ella y aprovechar para rezarle y pedirle un milagro para la pena que les aflige en ese momento.

La Divina Pastora no solo recibe en su regazo a los agradecidos por los favores concedidos sino también a los que han perdido a sus seres queridos y van en busca de consuelo ante la madre que está siempre dispuesta a ofrecerlo.

Nos muestra la santísima virgen a su hijo Jesús para que confiemos en él y vivamos en paz espiritual y nos recuerde cuan amados somos.

Por eso, los primeros días de cada año, los barquisimetanos nos quitamos los trajes navideños y nos vestimos de espiritualidad para, multitudinariamente, acompañar con regocijo a nuestra Divina Pastora, como ovejas prestas a recibir todos los dones espirituales que nos trae, y comenzar cada año con amor y optimismo y con la presencia maternal eterna, que nos refrescará y consolará durante toda nuestra existencia.


Madre Santísima, tus hijos siempre te tenemos en nuestros corazones y te agradecen que nos ofrezcas tu regazo, donde sabemos que estaremos  eternamente protegidos. 

LA INSEGURIDAD YA NO ES UNA SENSACIÓN







Ya no son cuentos de los medios de comunicación, no es una sensación, como dicen algunos voceros del gobierno irresponsablemente, ya es una vivencia en carne propia; la inseguridad está tocando la piel de todos los venezolanos. 

No es aventurero afirmar que ningún venezolano no ha estado envuelto en una acción de violencia, tanto física como psicológica, producto de la galopante inseguridad que nos invade día a día. 

Lo peor de todo es la impunidad con que los delincuentes actúan. No hay quien le ponga coto a la situación. Si son apresados los delincuentes, por alguna u otra aberración de nuestro sistema judicial, son puestos en libertad, tan rápidamente como el delito que cometieron. 

Esta impunidad ha llevado a algunos miembros de la sociedad, ante la impotencia que los embarga, de tomar la justicia en sus manos, cuando el peligroso azar del momento le permite someter al delincuente que ha cometido un delito, cuya magnitud no importa a la hora de imponer el castigo.

Muy pocas de estas acciones han sido reseñadas por los medios de comunicación, y menos en los discursos de los políticos y funcionarios de turno, lo que se torna extremadamente peligroso, porque la sociedad venezolana, ante estas acciones, se está rebajando a los niveles delincuenciales que la podrían llevar por caminos peligrosamente indescriptibles. 

Urge de los actores y líderes de nuestra sociedad, que tomen las riendas de esta situación y aunar esfuerzos para que esta situación no alcance niveles inalcanzables de anarquía. Se necesita un pacto social que, mediante mecanismos legales y educativos, produzca soluciones tangibles urgentes que nos permita a los venezolanos disminuir hasta límites controlables los niveles de inseguridad. 

Dentro de este pacto el periodismo, como ciencia social, debe jugar un papel protagónico en generar mecanismos sociales que ayuden a controlar la inseguridad en el país. La inseguridad y los mecanismos para enfrentarla, debe formar parte primordial en los contenidos informativos de todos los medios de comunicación escritos y audio visuales. Se hace necesario convertir el periodismo en material educativo que provoque los cambios que permitan a la sociedad venezolana enfrentar de una manera eficiente y eficaz el flagelo de la inseguridad que nos está arropando a todos y que está acabando aceleradamente con la otrora tranquilidad del venezolano.

Juan Gabriel - Ya Lo Se Que Tu Te Vas



ÁNGELES DE LA MÚSICA: JUAN GABRIEL CON LA ORQUESTA SINFÓNICA NACIONAL DE MEXICO. SI DUDA ALGUNA: ¡CELESTIAL!

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Ingeniero Mecánico. Magister en Mantenimiento Industrial y Licenciado en Comunicación Social. Mención Desarrollo Social. Profesor Universitario de Pre y Post grado en Ingeniería